Y MARIANO Y ANTÓNIA " BONA CANALLA"
Según libro escrito por:
JOSEP COSTAJUSSÀ OLIVER
En: SABADELL,anys'70
I recordat per :
LES CRÍTIQUES d'en JUSSÀ
Per: JAUME COSTAJUSSÀ OLIVER
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Dinero, lo que se dice dinero, Mariano y Antónia, no ganaron nunca. Antes de venir al Estadio nuevo, el sueldo sumado de los dos no llegaba a las 2.000 pesetas, pero de bastante diferencia. Al aterrizar en el nuevo Estadio se lo arreglaron, ya que en la antigua "Creu- Alta",su sueldo era mínimo y muy bajo, pero se defendían vendiendo bebidas, que toda aquella calle les iba a comprar. Muchos de nosotros ignorábamos éste detalle. A veces no nos preocupamos de la gente porque creemos que viven bien-dijo en varias ocasiones mi fallecido hermano Josep-. Pero lo cierto es que casi todo el mundo tiene sus dificultades,aunque se esté al servicio de un club conocido en toda España. La vida vista por dentro tiene muchas sorpresas.
LA DIRECTIVA SE PORTÓ BIEN CON EL MATRIMONIO
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Las directivas,en general, se portaron bien con Mariano y Antónia. Los directivos que el C.E. Sabadell,que vinieron luego no fueron una excepción. Se intereban a menudo por Mariano. Y por lo que indagamos estuvieron,en su momento, a la altura de las circunstancias. Aunque Antónia no pedía nunca nada, si podía defenderse por ella misma. " Varen ésser Bona Canalla", repite siempre, y la verdad es que siempre lo sintió así, aceptando como bueno su destino.
Mariano debió tener en su día un homenaje-beneficio. Pablo Mª Llonch lo tenía in mente, y lo hubiera llevado a cabo, como otros hizo con aquella trabajadora en comisión a sus órdenes, pero la muerte le sorprendió sin poderlo llevarlo a cabo. Después, por aquellas cosas que es difícil de explicar, pese a que se habló de ello,se pasó la última etapa en Primera División ,sin una mano que decidiera la conveniencia de ésta compensación humana y moral, que creemos estaba ganada a pulso. Hubiera sido una gran alegría para un Mariano, siempre entregado, y una gran ayuda. Pero la fecha magna quedó en blanco...
Por lo demás, Antonia y Mariano ,treinta años después,en el momento de escribir éste capítulo, y con muchos más cabellos blancos que ,hace treinta años, ahí estaban con el testimonio de una labor realizada. De un sacrificio continuado.
¿ Qué valdría después de unos años, regar un domingo, pagando horas extras, por ejemplo?
( CONTINUARÁ )
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