Muchos meses hacía que los atléticos en el "Calderón" no se veían sorprendidos por ningún equipo con la salvedad, además, de que en sus confrontaciones no tan sólo gustaba sino que convencía. No por ello, se esperaba al equipo ruso, que recordemos en su día dió también la sorpresa en el "Camp Nou", de una manera confiada ni mucho menos. Quizá la llave del partido fué el gol tempranero impreciso de los rusos, ya que a partir de aquí, si bien no podamos decir que practicaran un buen fútbol, si fueron prácticos tácticamente, logrando terminar los primeros 45m, con el 0-1 muy tempranero. En la segunda mitad, el Rubin Kazan, con un jugador menos por expulsión se dedicó a crear una auténtica muralla defensiva, prácticamente inexpugnable para un Atlético de Madrid que por si fuera poco jugaron uno de sus peores encuentros en mucho tiempo. Fueron imprecisos en los pases y perdonaron o no estuvieron acertados en dos o tres remates que quizá eran más fáciles de entrar que fallar. Esto sin contar el tiro de Falcao al travesaño, que hubiera valido el empate. Pero claro los postes también juegan...
Por si fuera poco, pasando ya de los cuatro minutos añadidos, los rusos remataron la faena a puerta batida, ya que el cancerbero atlético había ido a rematar, por si acaso, el último corner del partido en área rusa.
En fin, los atléticos, actuales campeones UEFA, siguen teniendo la confianza de todos sus seguigores, ya que un mal partido lo tiene cualquiera...
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